EL GRAN
PASTORDESPUES DE LA CRUZ, EL EVANGELIO:

LA CONGREGACIÓN DEL
REMANENTE DE ISRAEL A SION,
LA RESTAURACIÓN DEL
TABERNÁCULO DE DAVID,
EL REINO DE LOS CIELOS

En Isaías 49:6 se lee la encomienda principal para el Siervo de YaHVéH que habría de manifestarse:


“Poco es para mí que solo seas mi siervo
para levantar las tribus de Jacob
y restaurar el resto de Israel;
también te he dado por luz de las naciones,
para que seas mi salvación
hasta lo último de la tierra".


Aqui esta esbozado todo el plan de evangelización mundial. Las “tribus de Jacob” son el “resto de Israel”, esto es la “casa de Israel” en el destierro desde el año 722 A.C.. Hasta ella habría de llegar el Siervo sufriente para congregarlas – "levantarlas" – de nuevo a su tierra. Esto siempre confundió a los exegetas judíos. ¿Cómo el Siervo sufriente sería también quien congregara a la “casa de Israel” desterrada?. ¿O mas bien el "resto" o "remanente" de Israel, que otras traducciones vierten como “sobrevivientes" de Israel?. (Y nosotros sabemos que este resto/ remanente/ sobrevivientes de Israel son los salvos, los santos lavados por la sangre del Cordero).

A esta restauración de “las tribus de Jacob” a Sión también se refiere Amós 9:11:

"En aquel día yo levantaré
el Tabernáculo caído de David,
y cerraré sus portillos y levantaré sus ruinas,
y lo edificaré como en el tiempo pasado".
Amos 9:11


lo que Santiago reconoció que se estaba cumpliendo a partir del inicio de la misión apostólica, con la predicación del evangelio al mundo mas allá de los límites del judaísmo, como leemos en sus palabras finales del primer concilio de Jerusalem en Hechos 15:16-18:


"Después de esto volveré
y reedificaré el Tabernáculo de David
que ha caído
y reedificaré sus ruinas
y lo levantaré de nuevo.
Para que el resto de los hombres
busque al Señor
Y todos los gentiles,
sobre los cuales es invocado mi nombre
Dice el Señor, que hace conocer
todo esto desde tiempos antiguos".


Aquí esta el misterio revelado: el Siervo suficiente alcanzaría a la “casa de Israel” dispersa mediante la Palabra del evangelio. Ella invocaría el Nombre de Dios/Elohim – en este caso en la Persona del Hijo por inspiración del Espíritu Santo – sobre el mundo entero para revelar dentro de el a “las ovejas que oyen su voz”. La voz del Gran Pastor. Eso es también lo que nos dice Hechos 10:36:


Dios envió mensaje
a los hijos de Israel,
anunciando el evangelio de la paz
por medio de Jesucristo;
este es Señor de todos.


En donde “hijos de Israel” tiene le mismo significado que “casa de Israel” o “tribus de Jacob”. El "evangelio de la paz" fue enviado a ellos y en ese envío sería luz a todas las naciones de la tierra, sin distinción como profetiza Isaías 49:6 citado antes. Esto es, estaría disponible para todo corazón que recibiera por fe el sacrificio vicario del Siervo sufriente en la cruz a favor de sus pecados, y creyera en su resurrección de entre los muertos.

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En Jeremías 31:10 también se anuncia que habría un futuro Gran Pastor - en los tiempos finales que comienzan luego de la cruz - que se dedicarís a reunir elrebaño disperso de la “casa de Israel”:


"El que esparció a Israel lo reunirá y guardará,
como el pastor a su rebaño"


Y también en Ezequiel 36:24:


"Y yo os tomaré de las naciones,
y os recogeré de todas las tierras,
os traeré a vuestro país"

.
y en Sofonías 3:29:


"En aquel tiempo yo os traeré;
en aquel tiempo os reuniré,
y os daré renombre y fama entre
todos los pueblos de la tierra"


Y en Zacarías 10:8 se dice que este Gran pastor llamará a su pueblo santo con un silbido:


"Yo los llamaré con un silbido,
y los reuniré, porque los he redimido..."


y en Apocalipsis 19:9 se dice que este es el llamado a las bodas celestiales del Cordero - el Marido y Redentor de su pueblo (Isaías 54-5) - al cual debemos de estar atentos (estas bodas son la condición legal para al retorno a Sión),. Y se llama bienaventurados a quienes lo escuchen:


“... Bienaventurados los que son llamados
a la cena de las bodas del Cordero".


¿Estaremos atentos a este silbido/llamado?. SÍ, si mantenemos nuestras lamparas llenas de aceite. NO, si somos apenas cristianos culturales, seguidores de un rito externo pero sin haber exterminado en nosotros el amor a este mundo, y sin expectación en nuestro corazón.

...

En Juan 10:16 nuestro Señor Jesucristo confirma que Él es quien convoca las ovejas desterradas de su pueblo a Sión:


“Tengo, además, otras ovejas
que no son de este redil;
a esas también debo atraer
y oirán mi voz,
y habrá un rebaño y un pastor”.


De modo que el Rey que convoca al éxodo de retorno a Sión es tambien el Marido y Redentor (Isaías 54:5) de las bodas celestiales que recibe de nuevo a la esposa desechada. Y es también el Cordero de Dios inmolado en la cruz quien se identifica como el la raíz de David y León de Juda (Apocalipsis 5:5-6). El mismo que dejó instrucciones precisas a sus apóstoles/enviados:


”... id antes a las ovejas perdidas
de la casa de Israel.
Y yendo, predicad, diciendo:
"El reino de los cielos se ha acercado".

...

Después entonces de haberlo visto azotado, colgado exánime de una cruz y levantado de entre los muertos podemos estar seguros que ahora el Gran Pastor y Rey – y también Sumo Sacerdote de nuestra fe () - convocará un remanente santo de su pueblo y de todo aquel que escuche la Palabra del evangelio. Ya destruyó la muerte para siempre en la cruz y secó nuestras lágrimas (Isaias 25:8) y viene a morar con su pueblo:


“Y oí una gran voz del cielo, que decía:
- El tabernáculo de Dios está ahora con los hombres.
Él morará con ellos, ellos serán su pueblo
y Dios mismo estará con ellos como su Dios.


Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos;
y ya no habrá más muerte,
ni habrá más llanto ni clamor ni dolor,
porque las primeras cosas ya pasaron”.


El es “el testigo fiel, el primogénito de los muertos y el soberano de los reyes de la tierra”. El que “ nos ha lavado de nuestros pecados con su sangre, y nos hizo reyes y sacerdotes para Dios, su Padre” Apocalipsis 1:5-6).


“Las primeras cosas” - este mundo corrupto gobernado por los hombres – pronto pasara. Ahora viene el tiempo del “Tabernáculo de Dios con los hombres”, de “YaHVéH Justicia Nuestra” reinando sobre los reyes del la tierra desde una nueva Jerusalem. El tiempo del reencuentro con Sion luego de ser congregados de todos los extremos del cielo y de la tierra ().


Y el tiempo de la alegría que pondrá fin a una larga espera:

”Se dirá en aquel día:

«¡He aquí, este es nuestro Dios!
Le hemos esperado, y nos salvará.
¡Este es YaHVéH ,
a quien hemos esperado!
Nos gozaremos y nos alegraremos
en su salvación".
Isaias 25:8-9

Amen y amen

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