LA VARA Y EL CAYADO

DE YaHVéH
EN EL PLAN DE REDENCION
A LAS NACIONES


(tomado en parte de
“La herencia planetaria de Abraham
y de su descendencia” publicado en la
pagina principal de este multiblog)


* la Promesa

Casi todo en el plan de Dios/Elohim para las naciones se origina en la promesa/pacto de YaHVéH a Abram – luego Abraham. – que encontramos en el capitulo 17 de Génesis. ¿Qué dice esta Promesa - pongámosla con mayúscula porque es madre de muchas promesas – en su primera parte:

"- Este es mi pacto contigo:
serás padre de muchedumbre de gentes.
No te llamarás más Abram,
sino que tu nombre será Abraham,
porque te he puesto por padre
de muchedumbre de gentes.
Te multiplicaré en gran manera,
y de ti saldrán naciones y reyes".


Entendamos bien este versículo:

YaHVéH cambia el nombre de Abram – “padre enaltecido” - a Abraham – “padre de una muchedumbre de gente” -.

Vemos que “padre enaltecido” es poco para lo que YaHVéH tiene en mente para Abraham aunque parecería suficiente para cumplir cualquier objetivo humano. Pero YaHVéH – el Shaddai – tiene objetivos sobrenaturales para la descendencia de Abraham. ¿que entiende el Altísimo por “padre de una muchedumbre de gente” – Abraham - ?. Lo dice enseguida: “te multiplicare grandemente y de ti saldrán reyes y naciones”.

De Abraham surgirían entonces “reyes y naciones” – ¡en plural!. Lo cual confirma con la promesa para su mujer Sarai – luego Sara-:


"- A Sarai, tu mujer,
no la llamarás Sarai,
sino que su nombre será Sara.
Yo la bendeciré, y también te daré un hijo de ella.
... y vendrá a ser madre de naciones;
reyes de pueblos nacerán de ella".
(versos 15 y 16)


Sarai – “mi princesa” – es cambiado por Sara – “princesa” - que expresa un ámbito indefinido y amplio. Y se reitera la primera parte de la Promesa pero en clave femenina: “vendrá a ser madre de naciones” - en plural -.


Si seguimos adelante nos encontramos con Génesis 22:16-17 en donde YaHVéH promete al obediente Abraham ¡jurando por Si mismo!:


"...de cierto te bendeciré
y multiplicaré tu descendencia
como las estrellas del cielo
y como la arena que está a la orilla del mar;
tu descendencia se adueñará
de las puertas de sus enemigos".


Así YaHVéH ratifica que Abraham tendría una prole tan numerosa como "las estrellas del cielo y... la arena que está a la orilla del mar". ¡Inmensa!. Es obvio que esta comparación habla de una población que excede a una sola nación como las estrellas y las arenas del mar la exceden por ser universales

De Isaac la Promesa pasa a su hijo Jacob, que luego de su “lucha” con el Ángel a la orilla del Jaboc, recibe esta promesa/bendición:


"Tu nombre es Jacob;
pero ya no te llamarás Jacob,
sino que tu nombre será Israel;
También le dijo Dios:
- Yo soy el Dios omnipotente:
crece y multiplícate;
una nación y un conjunto de naciones saldrán de ti,
y reyes saldrán de tus entrañas".
(Génesis 35:11)


Nuevamente el cambio de nombre: de Jacob – “risas” – a ISRAEL – “Dios/Elohim lucha” – sorprendente y que inspira temor por la universalidad de su significado.

Y este será el nombre de la nación separada por YaHVéH para cumplir su Plan de Redención y formada por doce tribus de la descendencia de Jacob/Israel. ¿Pero sería una sola nación la que se formaría de la prole de Jacob/Israel?. Ya vimos que NO: sería “una nación y un conjunto de naciones”.


* la vara y el cayado


El Plan de Redención para las naciones de YaHVéH es un proyecto grandioso. Si aguzamos nuestro entendimiento veremos que este tiene dos facetas:

* la de la vara - el pueblo de la Ley - la nación judía - la que cuida los oráculos de Dios, "el pueblo del Libro".

* la del cayado - el pueblo de la gracia – el “conjunto de naciones” -el que iba a ser recogido de los cuatro vientos de la tierra mediante la predicación del evangelio, así como el cayado sirve para recoger a las ovejas en peligro. En suma: el de las “ovejas perdidas de la casa de Israel” - la simiente de Abraham dispersa y mezclada con las naciones sin memoria de su pasado -.


En hechos 10:38 se lee:

“Dios envió mensaje a los hijos de Israel,
anunciando el evangelio de la paz
por medio de Jesucristo;
este es Señor de todos”.

“hijos de Israel” son los descendientes del desterrado reino de Israel y significa lo mismo que “casa de Israel”. Y es en la búsqueda de esta simiente esparcida y desmemoriada de su pasado para hacerla retornar a Sión que "toda criatura" tendría oportunidad de escuchar la Palabra del evangelio, recibir en su corazón al Mesías de Israel, y entrar al Reino de Dios/Elohim venidero - el Tabernáculo de David redivivo del AT - la futura población de Sion glorificada.

La vara y el cayado de YaHVéH – la ley y la gracia - juntara un pueblo para su Nombre de entre toda la población del planeta. Este es el grandioso plan de redención a partir de la Promesa de una simiente superabundante a “Abraham mi amigo”. E incluye a todos.


¡Aleluya!

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